PÁGINAS

lunes, 28 de septiembre de 2015

LEONARDO PADURA, PREMIO PRINCESA DE ASTURIAS DE LAS LETRAS 2015













Leonardo Padura y su perro en una fotografia de Ernesto Santana Zaldívar

LEONARDO PADURA
Leonardo de la Caridad Padura Fuentes nació en La Habana, Cuba, el 9 de octubre de 1955.
Leonardo Padura es un novelista y periodista cubano, conocido especialmente por su serie de novelas policiacas protagonizadas por el detective Mario Conde. 

Desde 2011, ostenta, además de la cubana, la nacionalidad española, que el Gobierno le otorgó por carta de naturaleza. 

Estudió Literatura Latinoamericana en la Universidad de La Habana y comenzó su carrera como periodista en 1980 en la revista literaria El Caimán Barbudo y en el periódico Juventud Rebelde.


Después de varios años dedicado al periodismo  como jefe de redacción de  la revista cultural La Gaceta de Cubaen 1995 lo deja y con cuatrocientos dólares ahorrados, inició la serie de novelas policiales protagonizadas por el detective Mario Conde. 

Mario Conde es un detective alcohólico y romántico, que quiere ser escritor pero que tiene que conformarse con ser policía en la isla de Cuba.


La serie está formada, hasta la actualidad,  por las siguientes novelas: Pasado perfecto (1991), Vientos de cuaresma (1992), Máscaras (1995), Paisaje de otoño (1998), Adiós, Hemingway (2001), La neblina de ayer (2003) y Herejes (2013).






Con su novela El hombre que amaba a los perros (2009), alcanzó un indudable éxito internacional. 
La novela está basada en la historia de Ramón Mercader, asesino de León Trotsky que vivió sus últimos años en La Habana.
Aquí puedes ver una pequeña entrevista a Leonardo Padura sobre esta novela, su obra y las circunstancias que la rodean.




Leonardo Padura ha escrito también guiones cinematográficos, cuentos y ensayos, además de ediciones de sus entrevistas y reportajes.


















Leonardo Padura trabajando en su casa en La Habana


Además del Premio Princesa de Asturias de las Letras 2015, Leonardo Padura ha recibido, entre otros, el Premio de la Crítica en Cuba, el Francesco Gelmi di Caporiacco 2010 y, en 2011, el Premio Carbet del Caribe, el Prix Initiales y el Prix Roger Caillois, además en el 2012 Padura recibió el Premio Nacional de Literatura de Cuba.





LEONARDO PADURA, PREMIO PRINCESA DE ASTURIAS DE LAS LETRAS 2015



Leonardo Padura ha sido galardonado con el Premio Princesa de Asturias de las Letras 2015.

El jurado del premio destaca que Leonardo Padura:



"Es un autor arraigado en su tradición y decididamente contemporáneo; un indagador de lo culto y lo popular; un intelectual independiente, de firme temperamento ético.



En la vasta obra de Leonardo Padura, que recorre todos los géneros de la prosa, destaca un recurso que caracteriza su voluntad literaria: el interés por escuchar las voces populares y las historias perdidas de los otros.



Desde la ficción, Padura muestra los desafíos y los límites en la búsqueda de la verdad. Una impecable exploración de la historia y sus modos de contarla. 

Su obra es una soberbia aventura del diálogo y la libertad."








Algunos datos para la realización de esta entrada están tomados de la Fundación Princesa de Asturias.

Si quieres más información sobre Leonardo Padura, aquí puedes encontrarla:
Premios Princesa de Asturias 2015
Leonardo Padura: con la pluma y la espada
























viernes, 25 de septiembre de 2015

PHILIP ROTH, EL OFICIO: UN ESCRITOR, SUS COLEGAS Y SUS OBRAS




PHILIP ROTH E IVAN KLÍMA HABLAN SOBRE KAFKA (1990)


Entrevista que en el año 1990 realizó Philip Roth al escritor checo Ivan Klíma.



PHILIP ROTH: 
Kafka. En noviembre, mientras un marginado y ex presidiario, Václav Havel, hablaba a los manifestantes que en aquel momento ocupaban Praga y cuya acción daría lugar al nacimiento de la nueva Checoslovaquia, yo estaba dando un cursillo sobre Kafka en un college de Nueva York. Los alumnos leyeron El castillo, la tediosa e infructífera lucha de K. para conseguir que le sea reconocida la condición de topógrafo por el poderoso e inaccesible dormilón a cuyo cargo está la burocracia del castillo, el tal señor Klamm. Cuando apareció en el New York Times una foto en que se veía a Havel tendiéndole la mano, de lado a lado de una mesa de conferencias, al antiguo primer ministro del régimen, se la enseñe a mis alumnos. “Bueno”, les dije: “K. por fin consigue reunirse con Klamm.” A los estudiantes les encantó que Havel tomara la decisión de presentarse a las elecciones: así entraba K. en el castillo nada menos que como sucesor del jefe de Klamm.

La clarividencia irónica quizá no sea el más notable atributo de la obra de Kafka, pero nunca deja de sorprendernos cuando pensamos en ella. Kafka es todo menos una mente fantasiosa creando un sueño o pesadilla, en cuanto pudiera ser lo contrario de una mente realista. Su narrativa insiste, una y otra vez, en un punto: que aquello que se nos antoja una alucinación inimaginable, una paradoja imposible de superar, es precisamente lo que constituye la realidad de cada cual. En obras como La metamorfosisEl proceso y El castillo, nos traza la crónica de cómo alguien es educado para aceptar—más bien demasiado tarde, en el caso del acusado Joseph K.—que lo que parece fuera de lugar y ridículo e increíble, muy por debajo de la dignidad y de los intereses de una persona, es de hecho lo que estaá sucediéndole a uno: esto que se sitúa por debajo de mi dignidad resulta ser mi destino.

“No era un sueño”, escribe Kafka, poco después de que Gregorio Samsa despierte al descubrimiento de que ya no es un buen hijo que ayuda a su familia, sino una asquerosa alimaña. El sueño, según Kafka, es un mundo de probabilidad, de proporción, de estabilidad y orden, de causa y efecto: lo que a él le parece absurdamente fantástico es un mundo fiable, hecho de dignidad y de justicia. Cuanto le habría divertido a Kafka la indignación de esos soñadores que nos dicen a diario: “¡No he venido a este mundo a que me insulten!”. En el mundo de Kafka, y no únicamente en el mundo de Kafka, la vida solo empieza a tener sentido cuando nos damos cuenta de que para eso precisamente es para lo que estamos aquí.

Me gustaría saber qué papel puede haber desempeñado Kafka en tu imaginación durante los años en que estuviste en el mundo para que te insultaran. Los comunistas vetaron los libros de Kafka en las librerías, las bibliotecas, las universidades, incluida la de su propia ciudad natal, y en toda Checoslovaquia. ¿Por qué? ¿Qué los asustaba en Kafka? ¿Qué los irritaba? ¿Qué significaba para vosotros, que teníais un conocimiento íntimo de su obra y que incluso podíais sentiros muy identificados por sus orígenes?




IVAN KLÍMA: 
Yo también, como tú, he estudiado la obra de Kafka. No hace mucho escribí un largo ensayo sobre él y sobre una obra de teatro que trataba de su relación amorosa con Felice Bauer. Y yo formularía mi opinión sobre el conflicto entre el mundo onírico y el real en términos ligeramente distintos. Tú dices: “El sueño, según Kafka, es un mundo de probabilidad, de proporción, de estabilidad y orden, de causa y efecto: lo que a él le parece absurdamente fantástico es un mundo fiable, hecho de dignidad y de justicia.” Yo quitaría fantástico y pondría inalcanzable. Lo que tu llamas el mundo del sueño, para Kafka era más bien el mundo real, el mundo en que impera el orden, en que los seres humanos, al menos a su modo de ver, eran capaces de tenerse afecto, hacer el amor, tener hijos, cumplir ordenadamente con sus obligaciones; pero ese mundo era, para el, inalcanzable en su casi patológica fiabilidad. Lo que hace sufrir a sus personajes no es que no puedan alcanzar sus sueños, sino el hecho de no ser lo suficientemente fuertes como para adentrarse de veras en el mundo real, para cumplir de veras con su obligación.

En cuanto a por qué prohibieron a Kafka los regímenes comunistas, podemos encontrar la respuesta en una frase que dice el protagonista de mi novela Love and Garbage “Lo que más importa de la personalidad de Kafka es su honradez.” Un régimen edificado sobre el engaño, que obliga a la gente a fingir, que exige aprobación de boca para afuera, sin preocuparse para nada de cuales puedan ser las convicciones internas de aquellos cuyo consentimiento requiere, un régimen a quien le da miedo cualquiera que se pregunte por el sentido de sus propios actos, no puede tolerar que alguien cuya veracidad alcanza un carácter tan fascinantemente completo, tan terrorífico incluso, pueda dirigirse a los demás.


Si me preguntas que significó Kafka para mí, habrá que volver a la cuestión a cuyo alrededor estamos dando vueltas. En conjunto, Kafka es un escritor no político. A este respecto, me gusta citar lo que anotó en su diario el 2 de agosto de 1914. Es muy corto: “Alemania declara la guerra a Rusia. Por la tarde, escuela de natación”. Aquí, el plano histórico, un hecho que conmociona el mundo, y el personal se sitúan exactamente en el mismo nivel. Estoy seguro de que Kafka escribe por un único motivo, la necesidad de confesar sus crisis personales, resolviendo así lo que de insoluble había en su vida personal: sobre todo, sus relaciones con su padre y su incapacidad para ir mas allá de cierto limite en sus relaciones con las mujeres. Una de las cosas que hago ver en mi ensayo es que la máquina letal de su relato “En la colonia penitenciaria” es una imagen desesperada, apasionada y maravillosa del hecho de estar casado o comprometido. Hacia varios años que había escrito este relato cuando le confió a Milena Jesenska sus sentimientos ante la idea de irse a vivir juntos:

"Sabes, cuando intento escribir algo [sobre nuestro compromiso] las espadas cuyas puntas me rodean en círculo empiezan a acercárseme lentamente al cuerpo. Es un completo suplicio. Cuando ya están tan cerca que me arañan, la situación se hace tan terrible que allí mismo, inmediatamente, en el primer grito, me traiciono a mí mismo, te traiciono a ti, lo traiciono todo."

Las metáforas de Kafka eran tan fuertes que iban muchísimo mas allá de su intención original. Me consta que tanto El proceso como “En la colonia penitenciaria” se han entendido como sendas profecías del destino terrible que aguardaba a la nación judía en la Segunda Guerra Mundial, que estalló quince años después de la muerte de Kafka. Pero no eran ninguna profecía genial. Lo único que demuestran ambas obras es que un creador que sabe cómo reflejar sus experiencias más íntimas de un modo profundo y auténtico también alcanza la esfera suprapersonal o social. Estoy contestando de nuevo la pregunta relativa al contenido político de la literatura. La literatura no tiene por qué ponerse a escarbar en busca de realidades políticas, ni tiene por qué preocuparse de los sistemas políticos que van sucediéndose. La literatura puede ir más allá sin dejar por ello de resolver las cuestiones que el sistema vigente plantee al ser humano. Esta es la consecuencia más importante que yo extraje, para aplicármela, de Kafka.


Philip Roth, El oficio: un escritor, sus colegas y sus obras, Seix Barral. 
Traducción de Ramón Buenaventura.




miércoles, 23 de septiembre de 2015

IDAIRA RAMÍREZ, PYGMALION


IDAIRA RAMÍREZ
Idaira Ramírez es violinista y antigua alumna del Bachillerato de Artes del IES Menéndez Pidal de Avilés.
En la actualidad, después de ampliar sus estudios  con estancias en Corea del Sur y en Brasil, forma parte del cuarteto musical Pygmalion como violinista y cantante.

PYGMALION

El grupo Pygmalion está formado por cuatro músicos, Lya al violoncello, Berto a los teclados, Idaira al violín y voces, y Chily a la guitarra y voces.

Son jóvenes intérpretes con diferentes maneras de enfocar la música, que se unen en este grupo musical para dar lugar a una mezcla de estilos que van desde el rock más clásico, al sonido más sinfónico pasando por el folk o el progresivo con el fin de expresar sus inquietudes y sueños.


Si quieres verlos en directo, el cuarteto Pygmalion actúa en el Café Lord Byron de Avilés el próximo viernes 25 de septiembre a las 9 de la noche.

CONCIERTO DE PYGMALION


Concierto del cuarteto Pygmalion el viernes 25 de septiembre  de 2015,  a las 21:00 horas, en el Café Lord Byron.

Situado en la Calle Palacio Valdés, número 1, en Avilés, Asturias.










lunes, 14 de septiembre de 2015

VIRGILIO Y DANTE EN EL ARTE


DANTE Y VIRGILIO UN ENCUENTRO LITERARIO
El encuentro entre los poetas Dante y Virgilio nunca existió en el mundo real pues vivieron en épocas diferentes.


Publio Virgilio Marón es un poeta latino del siglo I antes de Cristo, que vivió en la época del emperador romano Octavio Augusto, y Dante Alighieri es un poeta italiano de los siglos XIII y XIV que marca la transición de la Edad Media al Renacimiento.



El gigante Anteo bajando a Dante y a Virgilio al Último Círculo 

por William Blake

Dante Alighieri consideraba al poeta romano Virgilio como su maestro.
En la obra de Dante, La Divina Comedia, Virgilio aparece como su guía a través del Infierno y del Purgatorio.


Dante y Virgilio visitando el infierno 
por Rafael Flores (1832–1886)


Además de la admiración de Dante por Virgilio, está el antecedente del descenso de Eneas al infierno para recibir los consejos de su padre Anquises, en el Canto VI de la Eneida de Virgilio.





















La barca de Dante por Eugène Delacroix, 1822


Los artistas plásticos han encontrado una gran fuente de inspiración en La Divina Comedia y en la visita de Virgilio y Dante al Infierno y al Purgatorio.


Dante y Virgilio a la entrada del Infierno por Edgar Degas



En esta entrada del blog puedes ver una muestra de algunos de los cuadros de diferentes autores, épocas y estilos en los que aparecen ambos literatos en su visita al mundo de ultratumba.



















Dante y Virgilio en el Purgatorio por Domenico Morelli


En muchos de los cuadros, ambos poetas aparecen con la corona de laurel como símbolo de su fama, mérito y reconocimiento público como grandes autores literarios.



Dante y Virgilio por Camille Corot


Apolo, a quien el laurel estaba dedicado, fue entre los antiguos el dios protector de la poesía, la música y las demás artes.



Dante y Virgilio con Paolo y Francesca por Ary Scheffer


Por estar dedicado a Apolo y por su verdor perenne, el laurel simbolizaba originariamente el triunfo y la gloria en general, y especialmente la que se consigue en el campo de las artes y el saber, un significado que va a prevalecer en la Edad Media y el Renacimiento y llegará a nuestra época.



Dante y Virgilio en el noveno círculo del Infierno por Gustavo Doré


La presencia del poeta coronado de laurel en la iconografía como símbolo del triunfo literario va a ser muy frecuente durante la época del Renacimiento.





















Dante y Virgilio contemplan el paso de Caronte por  Alexander Litovchenko


Si nos trasladamos al terreno de las artes plásticas, los retratos de poetas coronados de laurel en el Renacimiento son innumerables durante este período, pero esta tradición también se mantiene en siglos posteriores hasta llegar a nuestros días.


Dante conducido por Virgilio ofrece  consuelo a las almas de los envidiosos  

por Hippolyte Flandrin


En Italia, en pintura y en las miniaturas de los manuscritos, el poeta es representado frecuentemente coronado o rodeado de una corona de laurel, desde las conocidas imágenes de Virgilio y Dante, hasta Petrarca o Boccaccio.
















Paolo y Francesca de Rimini por Dante Gabriel Rossetti


Incluso esta imagen del vate coronado de laurel se repite en los retratos de poetas de otras nacionalidades como el inglés William Sahkespeare, el portugués Camoens, o los españoles Fernando de Herrera, Alonso de Ercilla, Francisco de Quevedo o Gertrudis de Avellaneda.



Dante y Virgilio en los Infiernos por Eugène Deully


Algunos datos para la elaboración de esta entrada están tomados de:

Revista de Literatura CSIC



Dante y Virgilio en el Infierno (1850)  William-Adolphe Bouguereau







domingo, 13 de septiembre de 2015

RODOLFO ELÍAS, ITINERARIO


RODOLFO ELÍAS
Rodolfo Martínez, que escribe con el seudónimo de Rodolfo Elías, es un escritor en ciernes, nacido en Ciudad Juárez y criado en ambos lados de la frontera entre México y Estados Unidos. 
Mantiene desde el 2011 Borderlandia, un blog en el que toca temas variados de literatura,  de crítica social, de arte y de música pop.
Colaboró en la, hoy extinta, revista bilingüe en línea, El Diablito, del área de Seattle en Washington. 
Sus textos han sido publicados en la revista SLAM, una de las revistas literarias más prominentes a nivel colegial, en Estados Unidos.
También ha colaborado con sus escritos en la revista digital alLímite, en La Linterna Mágica y en la revista mexicana en línea, Ombligo, de Ciudad Juárez.


Rodolfo Martínez ha publicado el relato Ciudad Juárez en la memoria de Dante en el suplemento literario asturiano El Cuaderno, en su número 60,  en su dosier, Palabra de Juárez, dedicado a la frontera y a Ciudad Juárez.


En el momento presente, Rodolfo Elías sigue colaborando con la revista mensual de cultura El Cuaderno y trabaja en dos novelas, una en inglés y otra en español en la que una parte de la trama se desarrolla en Madrid. 

Rodolfo Elías es autor de algunos microrrelatos como este titulado Itinerario:












lunes, 7 de septiembre de 2015

DANTE'S INFERNO


DANTE'S INFERNO
Dante's Inferno es un videojuego de acción para PlayStation 3, Xbox 360 y PlayStation Portable perteneciente al sub género hack and slash.













Dante’s Inferno  de EA y Visceral Games está basado en la primera parte del poema del siglo XIV, La Divina Comedia de Dante Alighieri, considerada la obra maestra de la literatura italiana.

Recrea los cantos de La Divina Comedia dedicados a la travesía de Dante y Virgilio por los círculos del infierno.



Este videojuego de acción permite a los jugadores vivir en persona el descenso de Dante a los infiernos y su encuentro final con Lucifer para redimirse de los pecados y llegar a su amada Beatriz.



Durante el descenso al infierno, Virgilio hará acto de presencia como una estatua con aspecto de deidad, en distintos lugares del camino, para servir de orientación y guía, explicando a Dante los detalles sobre los distintos círculos del Infierno.



El videojuego se inspira libremente en La Divina Comedia y naturalmente hay diferencias notables entre el desarrollo del juego y la obra en la que se basa. 



Sin ir más lejos, en el juego, el personaje de Dante no es un poeta sino un guerrero de la Tercera Cruzada.


Si quieres ver el inicio del videojuego Dante's Inferno, aquí puedes hacerlo: